Iglesia de Santiago Apóstol en Trespuentes

Localidad: Trespuentes / Tresponde

Dirección: C/ Santa Catalina 1

Tipo de monumento: Iglesia

Estilo: Gótico

Cómo llegar

HISTORIA

Trespuentes es la única “superviviente” de la populosa ciudad romana de Iruña. En el otro lado del río Zadorra se creó un barrio que se comunicaba con la ciudad por un puente y en el que vivían 45 vecinos. Dentro de este territorio, que pertenecía a las Hermandades del Duque, había dos monasterios: Santa Catalina de Badaya (hoy en ruinas) y Santa María de Iruña (considerada como una ermita), además de cinco ermitas y una cofradía.

DESCRIPCIÓN

Situada a orillas del Zadorra, la Iglesia de Trespuentes está dedicada a la advocación de Santiago Apóstol. Para acceder a ella, hay que atravesar un pórtico, sostenido por dos columnas toscanas, que fue diseñado como mirador y construido por el cantero Martín de Macaran en 1688. Desde aquí y una vez pasado un pequeño vestíbulo, se entra en el templo, donde se puede observar el estilo gótico del edificio, representado en una planta de cruz latina de una nave con dos tramos.

CARACTERÍSTICAS

La cabecera, que es donde está establecido el altar mayor, es de tres brazos. La bóveda de ésta es de forma estrellada y en las uniones de los nervios se pueden observar las claves, decoradas con motivos florales. Las bóvedas, construidas a finales del siglo XV, se apoyan en ménsulas (elemento estructural el voladizo) alargadas con forma de columna que no llega al suelo y con una moldura en su parte inferior.

En la parte izquierda del templo, existen otras dos capillas más, una que cuenta con un pequeño retablo y una bóveda de cañón, y la del baptisterio (destinada a los bautismos), donde se encuentra la pila bautismal y la subida al coro, que en la actualidad no existe.

El retablo es de estilo barroco español, un estilo recargado y con muchos elementos decorativos, en los que resaltan las columnas torcidas decoradas con vides (salomónicas), los copetes de flores y las molduras de hojarasca en los laterales de las imágenes. Toda esta ostentosidad, pretende provocar la emoción de la pasión y de la espiritualidad.

El retablo mayor está formado por dos pisos y tres calles y está coronado por un Calvario enclavado en un ático. En las calles de los lados, aparecen imágenes de San Miguel y San Pedro (izquierda) y San Roque y San Pablo (derecha). Ya en el primer piso, en la calle central, un gran arco cobija el Sagrario, mientras que en el segundo piso, se puede observar una imagen de Santiago montado a caballo que perteneció al retablo anterior y que todavía se conserva. Este retablo fue construido por los hermanos Antonio y Francisco Alvarado entre los años 1703 y 1706 y cobraron 6.807 reales por realizar la obra. Años más tarde, en 1713, se procedió a dorarlo.

Respecto a la torre, de planta cuadrada, hay que destacar el lugar en el que se construyó, poco habitual, en un lateral de la cabecera. En su parte más alta, se remató ya en el año 1974, con un curioso capitel metálico.